La pregunta surgió en agosto de 2020: Cristina Fernández de Kirchner versus Google, ¿quién ganará? Por ahora se impone ella, la vicepresidenta y ex presidenta argentina, que obtuvo un fallo favorable de la Corte Suprema de su país en su demanda contra el gigante de Silicon Valley. ¿Qué reclama la vicepresidenta argentina? Sencillo: durante unas horas de 2020, si se escribía su nombre en el buscador, la respuesta principal era una foto acompañada de una leyenda que la presentaba como «Ladrona de la Nación Argentina».
La política más poderosa de Argentina está involucrada en múltiples causas de corrupción en su país, pero no ha sido condenada hasta hoy en ninguna. Que Google la presentara como «ladrona» en el «panel de conocimiento» del motor de búsqueda fue motivo de demanda, según explicó en su momento a través de una serie de tweets de la segunda autoridad del Estado.
Carlos Beraldi, el abogado de la vicepresidenta, reclamó en su momento una pericia para establecer el nivel de daño a la imagen y el honor de su defendida. Kirchner quiere que «se detalle de forma clara y precisa cómo se genera» la publicación, «durante cuánto tiempo estuvo activa (y) qué cantidad de visualizaciones tuvo».
Google se negó a dar acceso a su motor de búsqueda. Dice no ser responsable de lo sucedido y alegó que acceder a su servidor implicaría una violación al secreto comercial. Tras recibir un «no» en dos instancias previas, la empresa, una de las más poderosas del mundo, recurrió a la Corte Suprema, el máximo tribunal del país, que también rechazó el planteo y le dio la razón a la vicepresidenta.
La pericia judicial en el servidor de Google es la base para estimar el daño. Google, según Beraldi, «publicó en su plataforma y bajo su responsabilidad información falaz y agraviante (…) mancillando» el «nombre, imagen y honor», de la ex presidenta. La pericia que solicita Beraldi es «un pedido de prueba anticipada para formular una demanda civil». Si la gana, la vicepresidenta anticipó que donará el dinero al Hospital de Niños de La Plata, capital de la provincia de Buenos Aires.
La gran paradoja de la demanda judicial entablada por Cristina Kirchner es que, al tiempo que multiplica hasta el infinito las publicaciones referidas al incidente «Ladrona de la Nación Argentina», esas menciones refuerzan el nivel de pruebas, de daño a la imagen y, por consiguiente, la potencial indemnización.
En agosto, algunos expertos en medios digitales mostraron su asombro por el hecho de que se demandara a Google, que funciona como un agregador de información, y no se apuntara a los dueños de Wikipedia, que es de dónde emanó la etiqueta de «ladrona» contra la ex presidenta. Una demanda contra Wikipedia, sin embargo, no tendría el potencial ni las posibilidades que ofrece a Fernández de Kirchner llevar a la Justicia a una de las mayores empresas del planeta.