¿De qué te arrepentirías si te quedaran solo tres meses de vida? Sin duda, es una pregunta muy difícil, pero que muchos pacientes se hacen cuando saben que van a morir pronto. Así lo explicó Bronnie Ware, una mujer que por ocho años fue cuidadora a domicilio de personas a las que les quedaban de tres a 12 semanas de vida.
Más que velar por ellos físicamente, Ware fue el apoyo emocional de los pacientes, quienes en esa dura etapa de la vida compartían sus arrepentimientos con ella. Y, sin pensarlo, comenzó a darse cuenta de que había uno en particular que se repetía entre hombres y mujeres.
El arrepentimiento más común entre las personas que van a morir, según una cuidadora de pacientes terminales.
Cuál es el arrepentimiento más común entre pacientes terminales
Bronnie Ware decidió escribir un libro, llamado De qué te arrepentirás antes de morir, donde reúne los relatos estremecedores, pero también emocionantes del momento previo a la muerte de las personas a las que cuidaba.
En esta línea, la autora encontró que el arrepentimiento más común fue: “Me gustaría tener el coraje de vivir una vida fiel a mí mismo, no la vida que otros esperaban de mí”.
Por ello, en su libro escribió que “es muy importante intentar honrar al menos algunos de tus sueños en el camino, antes de que sea demasiado tarde. La salud brinda una libertad que muy pocos perciben, hasta que ya no la tienen”.
De la misma forma, el psicólogo Michael Gervais le dijo a CNBC que este tipo de arrepentimiento lo ve “todo el tiempo” con sus pacientes, por lo que su recomendación siempre es enseñarles a valorar y apreciar el tiempo que tenemos en la Tierra.
El arrepentimiento más común entre las personas que van a morir, según una cuidadora de pacientes terminales.
Por qué el tiempo es tan valioso en la vida
“En la rutina diaria, es fácil desalinearse con lo que es más importante para nosotros. Pero vivir con conciencia de nuestra propia mortalidad cambia fundamentalmente lo que valoramos y cómo elegimos usar nuestro tiempo”, aseguró el psicólogo Gervais.
Es decir, aceptar el hecho de que no vamos a vivir para siempre hace que nos demos cuenta nuestros verdaderos valores.
Además, agregó que una vez que reconoces que el tiempo es mucho más preciado que todos los demás bienes, “ya no habrá desconexión entre las decisiones que deseas tomar y las decisiones que realmente tomas”.
También sugirió empezar a valorarlo desde hoy: “No es necesario esperar y luego mirar atrás y desear haber hecho las cosas de manera diferente. Puedes empezar desde cero hoy. Simplemente pregúntate de qué te arrepientes en este preciso momento”.