El peso oficial de Argentina se devaluó el miércoles un inusual 54,18% al cierre de sus negocios mayoristas, al compás de lo anunciado por el Gobierno en el marco de un fuerte ajuste fiscal para atacar una galopante inflación anual. La bolsa del vecino país, por su parte, se disparó al inicio de la jornada, pero finalmente cerró en rojo.
La moneda local se ubicó en 800 unidades por dólar. El peso informal cerró estable en 1.070 unidades por dólar, tras fuerte devaluación. La brecha se redujo a 33,8%.
El índice bursátil S&P Merval porteño se disparó un 6,2%, al récord intradiario de 1.072.661,76 unidades al inicio de la sesión, pero finalmente terminó con una leve caída de 0,56%.
Los bonos en dólares subieron hasta 3% en Wall Street, y están en su mayor nivel en dos años mientras que el riesgo país bajó 78 puntos base a 1.809 unidades. Los papeles de empresas de argentina que operan en EE.UU. cerraron con cifras mixtas a un día de los anuncios del gobierno.
“La situación es crítica con un 45% de pobreza y un 200% de inflación anualizada. Nos encaminamos a una hiperinflación y el objetivo es evitarla”, sostuvo el vocero Manuel Adorni.
Este miércoles, además se conoció que la inflación sigue golpeando con dureza el bolsillo de los argentinos. En el undécimo mes la inflación subió 12,8%, y acumula una subida en el año cercana al 150%.
En los últimos 12 meses el IPC acumula un alza de 160,9% y se espera un aumento del 20% y 40% mensual entre diciembre y febrero, según dijo el propio Milei. Esto dejaría a Argentina cerrando el año con un 200% de inflación acumulada en 12 meses, la variación más alta desde la hiperinflación de 1990.
Anuncio del gobierno
Este martes, el ministro de Economía, Luis Caputo dio a conocer 10 medidas contenidas en el plan de emergencia del gobierno. El secretario de Estado apuntó a que el país es adicto al déficit fiscal, y que no se ha enfocado en solucionar el problema.
Reducir al mínimo las transferencias discrecionales del Estado a las provincias, y recortar los ministerios fueron parte de los anuncios que hizo Caputo a eso de las 19 horas de este martes, en un mensaje grabado. Además, dijo que se va a sincerar el tipo de cambio oficial, que va a pasar a valer 800 pesos argentinos, es decir, más del doble que el actual.
“Vamos a estar peor que antes, particularmente en términos de inflación. Lo digo así porque, como dice el presidente, es mejor decir una verdad incómoda que una mentira confortable”, fue una de las frases que dijo el titular de Economía en medio de los anuncios.
Tras conocer los anuncios, los argentinos han mostrado su preocupación por los efectos de estas medidas en sus bolsillos.
“Va a ser durísimo y el tema es que se soporte, porque estos planes (como el anunciado) en un papel te cierran, pero después que no te salga la gente a la calle y con justificación. ¡No!”, dijo a Reuters el ingeniero agrónomo José Diz.
Otro argentino, comentó al mismo medio que “es una decisión que considero está bien porque esto no da para más. Pero también es un choque muy profundo para el bolsillo de la gente, te destruye”.
Por otro lado, el banco central argentino (BCRA) mantendrá la tasa de interés de referencia en un 133% anual, informó la entidad en un comunicado, e impondrá una nueva “paridad móvil” que debilite el peso un 2% mensual después de la fuerte devaluación.