Un total de 10 países miembros que conforman la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) desautorizaron este martes a la presidenta Xiomara Castro a referirse a las elecciones en Rusia, la situación en Haití y el conflicto en Gaza, en nombre de organización.
El grupo ha mostrado su molestia ante ciertos pronunciamientos hechos por la mandataria de Honduras y presidenta pro tempore de la CELAC.
Mediante un comunicado que ya fue publicado por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Uruguay y compartido a varias embajadas, las naciones denuncian que las posturas de Castro no han sido acordadas con los Estados miembro.
Las naciones son Argentina, Chile, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay. En el escrito se refieren a “los métodos de trabajo y procedimientos de consulta y vocería de la presidencia pro tempore para el funcionamiento orgánico de la CELAC”.
En primera instancia se refieren al mensaje emitido por la presidenta Castro en su perfil de la red social “X”, sobre las felicitaciones al presidente de Rusia, Vladimir Putin.
Las naciones establecen que dicho mensaje “debe entenderse exclusivamente como una declaración realizada en su condición de presidenta de Honduras, y no en su condición de representante de la presidencia pro tempore de la CELAC, actualmente ejercida por su país, ya que no se realizaron las consultas previas con los Estados miembros”.
Siguiendo la línea, puntualizan la comunicación expuesta en la misma red social y que muestra una nota dirigida al secretario general de Naciones Unidas, Antonio Guterres, en relación al conflicto entre Israel y Hamas, “no corresponde a una comunicación acordada por la CELAC”, dicen.
Finalmente, señalan la publicación de una carta suscrita por Castro y dirigida a los jefes de Estado y de Gobierno de la Comunidad en relación con la situación en Haití, la cual “no es procedente, pues no refleja una posición consensuada de la CELAC”.
El lunes 18 de marzo se realizó una reunión de coordinadores nacionales donde los mismos hicieron ver sus observaciones a la presidencia pro tempore de Honduras, solicitando que “en adelante se observen los procedimientos aprobados por nuestros jefes de Estado y de Gobierno para el funcionamiento orgánico de la CELAC”, reza el escrito.
“Esto significa que todos los documentos y manifestaciones deben ser consultados y adoptados con la aprobación de la totalidad de sus miembros, siendo el consenso la regla en la CELAC. El respeto a los métodos de trabajo y procedimientos de consulta y vocería de la PPT, garantizará el buen funcionamiento orgánico de la Comunidad”, terminan.
Desde el gobierno de Honduras aún no se pronuncian con relación a la molestia mostrada por parte de los 10 países miembros de la CELAC.
El saludo de Xiomara Castro a los comicios llenos de polémica, también fue reaccionado desde el gobierno de Estados Unidos, donde Antony Blinken, secretario de Estado, indicó que “las recientes elecciones presidenciales rusas se celebraron en un entorno de intensa represión de las voces independientes y de encarcelamiento, muerte o exilio de prácticamente toda la oposición política auténtica”.
Pese a lo dicho por Xiomara Castro donde adujo que Putin tuvo una “convincente victoria”, Blinken estableció que “estas elecciones solo pueden describirse como no democráticas”.
Gobierno dominicano refuta declaraciones sobre Haití que emitió Xiomara Castro
Castro consideró que la solución de la crisis en Haití debe ser liderada por los haitianos y que una «acción militar» violenta el principio de no intervención y el respeto a la autoderminación de los pueblos.
República Dominicana calificó este martes de «inapropiado» hablar de «intervención militar en Haití», declaración que atribuyó a la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, en un comunicado emitido por la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac), cuya presidencia pro tempore encabeza la mandataria centroamericana.
La Cancillería dominicana afirmó en un comunicado que el contenido de un comunicado «unilateral», que atribuye a Castro haber emitido el 15 de este marzo, contradice la postura oficial de la Celac respecto de la crisis en Haití, «creando confusión».
En ese sentido, el Gobierno dominicano recordó que la declaración de Kingstown, adoptada por la Celac el 1 de marzo, exige una solución liderada por Haití que abarque un diálogo amplio entre la sociedad civil y los actores políticos y reconoce el papel que los países y organizaciones de la región hacen para colaborar con la solución.
El comunicado agregó que, en su párrafo 73, la citada declaración explícitamente llama a la «implementación pronta y efectiva de la resolución 2699 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, incluido el establecimiento de las condiciones de seguridad necesarias en Haití».
Dicha resolución del Consejo de Seguridad de la ONU autoriza a los países que hayan notificado al secretario general de la Organización a conformar y desplegar una misión multinacional de apoyo a la seguridad en Haití (MSS, por sus siglas en inglés), afirmó el comunicado.
«La resolución también autoriza explícitamente a la MSS a apoyar a la Policía haitiana a restaurar el orden en ese país», expuso la Cancillería dominicana.
En el comunicado, la presidenta Castro habla de «intervención militar» lo cual es un término inapropiado, pues la MSS ha sido solicitada, reiteradas veces, por el Gobierno haitiano y autorizada por el único organismo internacional que tiene la facultad, según el derecho internacional, para permitir el uso de la fuerza a nivel internacional, apostilló el comunicado.
Bajo los términos de la resolución, el Gobierno haitiano y el Gobierno de Kenia, país que liderará la misión, han firmado un acuerdo para materializar el despliegue de la MSS.
Además, en el seno del Consejo de Seguridad y en los organismos internacionales de la región, como la Celac y la Comunidad del Caribe (Caricom), existe consenso sobre la legitimidad e importancia de la MSS, concluyó el parte oficial.
Haití atraviesa desde mucho hace tiempo una situación de crisis, que empeoró aún más tras el asesinato en 2021 del presidente Jovenel Moise, y posteriormente ha visto el empoderamiento de las bandas armadas.
La situación de violencia llevó en octubre pasado a la ONU a aprobar el envío al país de una misión multinacional de asistencia a la seguridad que encabezará Kenia, pero que aún no se ha materializado.